viernes

Es la primera vez que la televisión que se pone y no se apaga. Nos concentramos a ratos y murmuramos la locura de las noticias. No hay mucho cambio en el tema de conversación aunque tampoco es que charlemos mucho.

Ya no hablo con El Rey a menos que me haya quedado sin opciones. Habíamos llegado a un punto de comunicación inviable. 
No me vale como respuesta que al ser ascendente pueda tener licencias que condena al dueño de la casa en la que estamos. 
A momentos me recuerda un intento de el gran Gatsby. En caricatura. 

Con La Bruja he tenido un par de choques: necesito respirar.  Y Compinche cuando se entona [antes era un ciclo: día sí- día saliente de guardia - día manitas; ahora : hoy sí y en cuanto pueda también, si no para mejor] no ayuda, ahoga más.
¿Cuán difícil es entender que conozco mis límites? 


sábado

¡Que en el pueblo no falte cerveza! - aunque no me sean buenas las rubias-

Mi relación con C.Cano, Compinche y Mera es diferente a la que El Rey cree tener derecho. Así que me descojono cuando, junto con La Bruja, miran lo que he bebido o lo que no.

Sé mi límite y que las rubias no son buenas para mi, pero no sé donde vi que era buena idea ayudar a rebajar el vaso para irnos antes.

Se empeñaron en salir a tomar unas cañas [y morenas no las hay o no las he visto. Ni hay tradición de beberlas]. La bajada era fácil... subir la cuesta no sé si era por lo empinada o por las que llevaba [puede ser ambas, no descarto esta opción]. He descubierto que el whiskey con agua está dulzón [y entra muy fácil].

Y que mis tíos tienen un master en filosofía de bares que se resume en `las mujeres son malas y están muy buenas´ [añado: con sus excepciones].

Cuando íbamos a retirarnos, la luz de la casa de Sangre estaba dada. El Rey hizo camino a ver a su hermana. El resto siguió camino a la casa.

Yendo para la cama, nos juntamos en la cocina ¡Y más cervezas! [la hidratación es un tema muy serio]. Y no sé cómo terminamos bailando, cantando [o berreando las canciones que leíamos, cuando la letra estaba], por no decir que hicimos un estupendo coro a bases de `uuuuu´.   


domingo

El Rey y yo no hemos llegados a las manos porque La Bruja ha intercedido y nos puso en orden. 
A veces creo que no hemos llegados porque sabe que no puedo contestar, aunque ello no le quite para hinchar pecho. Compinche estuvo presente en un rifirrafe ya no bromea tanto; C.Cano quiere hacer burla y le cuesta recordar que tampoco fue hijo ejemplar.
He intercambiado algunas frases con Señora. Por lo menos sé que leer. 

Menos mal que Zaragoza ha pasado el día en el pueblo. Somos táctil. 

Salí de la casa de C.Cano para perderme.Salí sin compañía, a mi paso distraído. Volví con equilibrio.


  
Ha muerto la mujer del practicante. La estimaba mucho. Era muy atenta, cariñosa y lista. Una buena mujer.

viernes

Como dije WyW no dejan descansar. Los gritos de desacuerdo por cómo actuar acompañan a los susurros para que no se oigan. Y no estamos, todavía, bajo el mismo techo. La Bruja ya no tiene deberes con Wendy, El Rey menos [que para los suyos todo tenga excusa y cuando es de los otros todo sea pamplinas].

Compinche tiene sus ciclos, así que es quien más en su sitio pone a Wendy. 
C.Cano siendo el mayor es el hermano más protector, sale más perjudicado de las gilipolleces de WyW.
La familia no se escuchan cuando hablan-mos. Se acentúa en cada conversación. 

No soy familiar porque no hay tiempos tranquilos de ser. No hay refugio con ellos. ¡Nemo propheta acceptus est in patria sua! Es un continuo tener que  explicar que ahoga sin estar en piscina.

Señora mandó unos títulos para información. Y no tengo una Biblioteca cerca, en unos días creo que sí seré capaz de obtener las obras. 






sábado

Estos días han sido de contradicción en los discursos y actos entre Los Reales - hasta SheHulk que no está en la misma zona geográfica-. Por lo menos, ya no hay mosqueo  cuando huyo de la memoria cuando salgo de la habitación o <no doy suficiente atención para contestar>.

C.Cano está siendo salvavidas. Creo que lo sabe.

Señora escribió. Quiero estar, no sé cómo. No quiero que el resultado sea más auch [en esta ocasión "entable amistad con la soledad... ella se enamoró de mí" me viene a la mente]. 

Menos mal que la casa de C.Cano es grande con multitud de rincones para jugar al escondite. 



lunes

Pueblo + alcohol = rutina; no bien

Quería haber pasado más tiempo en el refugio, pero este año no había excusas que ayudaran. Así que la visita fue corta y apresurada. El tiempo justo para hacer de las mías. 

El Rey quería haberse ido al pueblo desde que volvimos de los médicos. Al final nos llevó él, por problemas de organización, coches e impaciencia.

Los problemas con WyW siguen arrastrando [no va a parar].

Al llegar al pueblo en casa de C.Cano, había problemas con Mera y Compinche. [En la comida familiar, me toco al lado de una prima en estado de buena esperanza: no paré de comer ni beber vino ¡Me daba por sonreír! Ahora ya me he acostumbrado- algo- a verla] Como llegamos a la hora de la cena había que celebrarlo. Mera ha demostrado que tiene carácter y buen modo.

Si Compinche ha obrado mal antes su última idea es para varearlo por si da bellotas. C.Cano y La Bruja le han explicado que las visitas se mantienen y no se pasan a otros. A Compinche ya no le divierte tanto. Intentó implicarme, otra vez, en una salida: no le había hablado, en voz -un poco- alta, más claro antes.

Tal y como hemos empezado: Creo que no tengo resaca porque no he dejado de beber. Y aún así ha llegado el punto en el cual al beber pongo la copa en los labios y simulo, porque aprecio mi hígado y riñones; el corazón y pulmones van a dar problemas así que no les voy a cargar con más daños; la piel ya de por sí la tengo de aquella manera; ¡Me gusta comer! El estómago no me gustaría que se jodiera; y respecto al cerebro ¡Para algo que va medianamente bien no lo vamos trastocar!   


C.Cano está manteniendo el tipo [hay veces que se pone un poco nervioso] de manera sorprendente. 

martes

Menos mal que había críos que distrajeran la atención, consiguieron que las horas fueran más livianas. Como era una reunión familiar no faltó quien tomara de más y bueno... había un sillón con el cual charlar.

El Rey está metiendo mucha prisa para ir al pueblo. Cada día pregunta planes que no le hacen gracia. 

Ha habido momentos en los que La Bruja se ha mordido la lengua porque ¡Ya son muchos años y nos conocemos todos! Para ir cambiando de raíces. 

LittleBoy ha hablado con su hermana - La Bruja- las cosas con la Trepa [si todavía no sabes que los nombres son, hay problema de comunicación] no van bien. Quiere hacer lo mismo que Compinche, sin demasiado festejo.

He descubierto que Cocinas [no le gusta nada cocinar, prefiere lavar los platos], tiene amistad con La Bruja desde que iban a primaria, es de mimos ¡Dejó que me acercara! 

jueves

Fuimos a los médicos. En esta ocasión cuando me descojonaba decía que era de los nervios de las pruebas - no hubo agujas-. No hubiera sido respetuoso decir que El Rey y La Bruja están mintiendo en sus formas. O que no se fían lo suficiente de mí para cuidarme, aunque destacaba cuando hablaban.

No sé para qué van ¿Hacer turismo? No retienen la información que dicen los médicos y experimentan límites que ya sé.  ¿Cuando van a entender que somos diferentes? Lo que a ellos les funciona o les molesta no tiene los mismos efectos en mi.
Mientras compran ropa o cachivaches que solo abultarán en la nueva mudanza - tengo que mirar dónde-.

Pregunta todo ¡Más mentiras! Porque: 

¿Poder ser independiente? Te hemos engañado muy bien.

Antes que todo explotara había hecho decisiones, las mantengo. Hace años que lo había aceptado después de todo no hay mejores ciegos que aquellos que no quieren ver.
Reían cuando las hablaba, ahora son discursos para que cambie de opinión porque tengo que vivir mi vida como ellos quieren. 

No están haciendo fácil olvidar que no hay alguna esperanza: la palabra ya la dí. 




domingo

Es una comedia, en el concepto actual aunque a momentos es clásica.  Conversaciones que dejaron de tener importancia son ahora renglones esperados. No pude evitar salir del guión para reír cuando preguntaron si necesitaba ayuda para ponerme y atar los zapatos [porque cuando no tengo a nadie a mi alrededor no me los pongo ¿O qué debieron de pensar?] o si doy un paseo preguntan por la empresa [no sabía que estaba prohibido caminar sin compañía].

No son táctiles. Las charlas son sin sentido [bueno... tienen uno, el que quieren dirigir- ¡Todavía no se dan cuentan que el efecto es nulo!]. 

Por lo menos hay humor. 

martes

Volver al fondo del armario y sacar ropa que no son más que disfraces. Volver frente al espejo para corregir formas. Poner unos libros antes que otros. Esconder mi camisa favorita. Guardar las libretas que me han salvado. Repasar las respuestas que quieren escuchar. 
Para que no haya errores. 

El Rey y La Bruja vuelven para trastocar, imponerse. La emoción del encuentro no dura mucho por preguntas y exigencias que acribillan. 

Vuelven y no hay escapatoria. 

Faltas pocas horas. No comprendo al hombre de hojalata.