viernes

Does the truth imprison us, or set us free?

¿Qué tan importante es la verdad? Si al final solo son percepciones que el cerebro decodifica por lo tanto no es única ni real en sí. 

¿Entonces defiendo la mentira? No lo sé. Entiendo este concepto con las mismas bases que la verdad. 

Encuentro curioso, y no muy racional, la separación o clasificación de estos términos en cuanto a su posible quimera. 

miércoles

Ameli- ha recordado que nos lo pasamos muy bien cuando nos vemos. Propone ir a Granada otra vez.

J-D y yo hemos hecho un examen de nivel de inglés, casi pedimos clases particulares de speaking [esperamos que nos de clase quien nos evaluó]. 

Había `olvidado´ a Coy y a 15140, con él me cruce de casualidad con un saludo malo y la otra me habla, debe ser que está aburrida. Saben cómo contactar conmigo. 

Con Los Reales no he vuelvo a hablar.

El calor dilata, el cuerpo lo nota. 
Echo de menos bailar. 


Hice de las mías con N-B- hay dos cosas con las que no se juega: la comida ni los mismos [y para Tercero ni las cremalleras]-.

Estas horas han sido una confusión. De solo tener que quedar con Itala [finalmente quedo con ella mañana] a no poder ir a ver los proyectos de CuentaCuentos. 


sábado

The adventure starts here

Medusa regaló un aviso, en forma de mochila. Habíamos quedado y sorprendió. Vaya si sorprendió. A parte del diseño, que me gusta más que la que tenía, es más espaciosa y más cómoda. También es resistente. 
¡Lo tiene todo [hice la prueba de capacidad así que sí]!

Es curioso, el lema que inscribe. Porque es como entiendo lo que conlleva una mochila [una mente física] para los imprevistos a sobrevivir, recuerdos y despistes; alegrías y tristezas; historias con final y otras que no empezaron; sensibilidades y pensamientos; tortura y redención; café para no dormir y café para respirar; sorpresas y decepciones. 

Como las tortugas. 

The adventure starts here. No hay retroceso, solo camino por delante. No está permitido regresar a la casilla de partida. Un recordatorio que no esperaba. 

Hace más de unas noches La Princesa conoció a J-D, le dijo entre otras cosas que yo era irresponsable e inconsciente. Que esperaba que al volver con ellos - Los Reales- no hiciera tantas tonterías. 
Compartieron anécdotas. 
J- D nos está buscando soluciones - para su independencia y para que yo no vuelva-. Se alegró de la mochila. 

The adventure started here.  




lunes

No hubo defensa, preguntaron. Dudaron y preguntaron si realmente si mi tara era mental. 
Por suerte, ¿para quién?, pude dejar claro [no había borrado lo grabado] las actuaciones de cada uno. 

La hermana pequeña de El Rey, mi madrina, se quejó de unos disparates, que según ella, yo había osado cometer. Él escuchó y calló. No hubo defensa. Dejó la conversación dando la razón sin dudar de lo contado.

La Bruja preguntó mientras echaba la bronca por si acaso ... y encima no está bien que me moleste. 



Lo jodido de "ser especial" es cuando lo dicen en un ámbito que no tiene puta gracia serlo.


"Ser especial" es una putada de las grandes, lo aprehendí así y doy fe - la poca que tengo- que es cierto.  Es decir que está mal sin tener que utilizar las palabras exactas. 



miércoles

Batalló hasta cansar, a ella y a los que la acompañaron.

La bebida fue su perdición, aunque los últimos años no pudo levantar una copa, y para sus hijos, también, quienes vieron poco a poco el desarme de una torre a medio construir [matrimonio joven].

Estas semanas el cuerpo se cansó de los desfases que aguantó, de un ritmo sin hora que marcaron noches de sustos. Tardes de lágrimas. Oraciones en los ateos. 
Desesperación y una esperanza fatigada. 






domingo

Viene la familia: Que aleg..¡Agobio!

Los Reales- menos La Bruja- vinieron por otra foto con mucha gente. El Político, Medusa y S.N. saludaron a El Rey y a La Princesa, no entendieron el gesto. 

Por suerte, hubo un partido para escapar de ellos aunque no fue suficiente tiempo. Por cierto, ascendimos a primera división.

Un viaje lleno de excusas en la imposición de planes sin recordar que hay compromisos ajenos, tanto por los que vinieron como por los anfitriones. 

El Rey tuvo que alardear [ si no revienta] mientras La Princesa optó por picar, por lo que se justificaba que en esta ocasión no le afectaba.

Agobio, no alegría.  Tensión, también, y no baja precisamente.