miércoles

Deje a elección

No tengo permiso por más preguntas. Las nulas respuestas son merecidas. Una anécdota más de una historia que no sé.

Olvidar la tan equívoca ejecución, para no volver a caer. Quitarme el sombrero porque no he de llevarlo puesto ni hoy ni mañana. 

Regresar a la cama con las caricias que callan a cambio del conocimiento [siempre cruel].

Como la sencillez que tiene un movimiento de cabeza se pone el sol y celebró por las noches que sumergen en la maldición de datos. Mezclarme con el humo de cigarrillos por ser dudoso el agarre. 

Brindar por el ruido que hay que silenciar. Escuchar las miradas, los toques evasivos y las palabras de engaño.
Palabras que rompen el significado con la mirada eterna...¿De qué?

¡Ignorar todos los actos! La vulnerabilidad no se hace presente si no se da a conocer. Es el momento de no ser.

Testigo inválido, cómplice pérdido. Los lados del bien y el mal se confunden en la defensa ¿Trampas o estrategia por un mismo fin?

Confesiones peligrosas cuando el conocimiento fue el peor regalo.

Las piezas bailan a un mismo son ¿En qué casilla estoy?

La respuesta grita el lema:¡Hoy somos soldados!

No hay comentarios:

Publicar un comentario